Lamar Odom volvió a protagonizar otro incidente este martes. El exjugador de la NBA, alejado de los focos tras el problema que tuvo en un burdel de Nevada y la larga recuperación que ello le conllevó, ha vuelto a las andadas con el alcohol.
Odom fue el clulpable de que un vuelo de Delta Flight de Los Angeles a New York tuviera que ser retrasado casi una hora respecto del horario de salida previsto inicialmente. El ex de Los Angeles Lakers y Los Angeles Clippers estuvo consumiendo alcohol -whisky y cervezas según los testigos citados por "TMZ Sports"- antes de montar en el avión. De esta forma, Odom subió ya borracho, lo que acabó provocando que vomitara y manchara toda su ropa y el pasillo de la zona reservada para los pasajeros de primera clase.
Los pasajeros aseguran que los asistentes de vuelo le atendieron cordialmente y le acompañaron fuera del avión, mientras que un equipo de limpieza montó a bordo para limpiar el desastre. Los asistentes tomaron las pertenencias de Odom, las pusieron en una bolsa de plástico y las sacaron del aparato.
Diez minutos después, Odom volvió a subir al avión, todavía manchado por su propio vómito, y se sentó de nuevo en su asiento. Al poco tiempo, se levantó y se dirigió hacia el baño, teniendo que apoyarse en las cabezas de la gente para mantener su equilibrio. Uno de los pasajeros le dijo a una azata: “¿No conocen su historia? No quiero tener un cadáver a 9.000 metros”. Finalmente, Odom tuvo que bajar del avión antes de que el vuelo despegara, llegando a New York con 40 minutos de retraso.
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