Dos estudiantes estadounidenses idénticas se encontraron por casualidad en un evento deportivo y descubrieron que eran hermanas gemelas que llevaban separadas 17 años, informa la Web de noticias LifeNews.
El destino llevó a Jordan Dickerson y Robin Jeter, de Filadelfia, a un estadio de Washington donde se celebraba una competición de atletismo. Las chicas habían vivido en Filadelfia durante 17 años, pero nunca se habían cruzado por la calle, ni siquiera sabían la una de la otra.
Dickerson explicó que un compañero de la universidad fue quien notó el parecido entre ambas. “Yo pensé que estaba exagerando y no le presté mucha atención, pero después la curiosidad pudo conmigo”.
Ella detalló que amigos de Robin Jeter le dijeron su nombre. “Y entonces lo entendí todo: ¡Jeter era mi apellido antes de que me adoptaran!”, dice Jordan.
Jordan admitió que en cuanto este pensamiento le vino a la mente se puso a llorar, incapaz de reprimir la emoción. Luego la madre adoptiva de la joven le dijo que esa chica probablemente era su hermana.
“Cuando me acerqué a ella creía que me estallaría el corazón”, recuerda Jordan. “Es increíble, hasta tenemos el mismo número de zapatos, nos encanta el deporte e incluso comemos lo mismo”, añadió.
Jordan esperó hasta que la competición terminara para contarle a Jeter que eran hermanas gemelas.
“En ese momento me sentí la persona más afortunada del mundo”, comenta Robin. “Es difícil describir lo que se siente cuando miras a una persona y te ves reflejada en ella” añadió.
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