La aeronave, operada por la empresa privada Global X, aterrizó pasadas las
3:20 de la tarde con unos 127 ciudadanos dominicanos deportados, además de
una veintena de personas que estaban en tránsito hacia otros destinos.
Entre los repatriados, uno de los casos llamó especialmente la atención de
las autoridades y los medios presentes: un hombre esposado de manos y pies
fue el primero en descender del avión, custodiado de inmediato por miembros
de la Dicrim y del Ministerio Público. Aunque su identidad no ha sido
revelada oficialmente, su traslado fue tratado con un nivel de seguridad
diferenciado y fue rápidamente ingresado a uno de los vehículos del convoy
policial.
Tras este operativo inicial, el resto de los repatriados comenzó a
descender, algunos cubriéndose el rostro para evitar ser identificados,
mientras que otros, al notar la presencia de cámaras, hicieron señas con las
manos o miradas desafiantes.
En lo que va del segundo mandato
del expresidente Donald Trump, más de 2,000 dominicanos han sido deportados
desde Estados Unidos, en el marco de medidas migratorias más
estrictas.
Las autoridades dominicanas no ofrecieron declaraciones oficiales al
momento del arribo, pero se presume que varios de los repatriados
enfrentarán procesos judiciales pendientes en el país.
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