Estudiantes de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) solicitaron a las autoridades universitarias poner atención al deteriorado edificio que los aloja, tras advertir que temen por sus vidas en caso de que ocurriese un terremoto.
En contraposición a las grandes edificaciones que se han construido en todo el recinto universitario, en su sede central, la Facultad de Humanidades, que lleva el nombre del héroe de la Revolución de 1965, Francisco Alberto Caamaño Deñó, luce la cenicienta. Sus paredes tienen grietas, los techos se observan con fuertes filtraciones, las escaleras inservibles, las persianas rotas, los baños con falta de higiene.
Asimismo, las condiciones en que los profesores imparten la docencia y los estudiantes la reciben no son las mejores, pues el calor y la falta de butacas y escritorios están a la orden del día.
Por Rosa Alcántara / Hoy
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