El actor chino de películas de acción, Jackie Chan, sostuvo ayer que siente vergüenza por su hijo, Jaycee Chan, de 32 años, acusado el lunes por la fiscalía de Beijing, China, por un caso de drogas que lo podría llevar a cumplir hasta tres años de cárcel en ese país.
Contra Jaycee Chan, pesa una acusación de dar refugio a consumidores de drogas, según Prensa Asociada.
El escándalo es particularmente vergonzoso para Jackie Chan porque irónicamente Beijing lo designó “Embajador antidrogas” en el 2009.
El actor que desarrolló una carrera de cine en Estados Unidos, es miembro del organismo político asesor más importante de China, La Conferencia Política Consultiva del Pueblo Chino, dijo que no utilizó sus influencias en el caso, y expresó la esperanza de que su hijo, también actor, y cantante, sea un embajador antidrogas una vez liberado de la prisión.
La policía de Beijing detuvo al hijo de Chan en su apartamento de Beijing en agosto junto al actor taiwanés Ko Kai.
Las autoridades declararon que los análisis toxicológicos que se le realizaron en ese entontoces revelaron que ambos habían consumido marihuana y que se hallaron 100 gramos de la droga en su casa. Ambos reconocieron haberla consumido.
Ko, cuyo verdadero nombre es Ko Chen-tung, cumplió 14 días de detención administrativa, pero Chan, que sigue preso, enfrenta el cargo más grave.
Jaycee, el único de Jackie Chan, aparece con frecuencia en los medios de comunicación y a actuado en varias películas. Además ha grabado tres discos.
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