El rapero Nick Cannon se ha sometido a una sesión intensiva de tatuaje en el estudio Covina de California para ampliar el diseño de un Cristo que luce en su espalda y camuflar completamente el nombre de su exmujer, Mariah Carey, que se grabó entre los omoplatos en los años más felices de su matrimonio.
Lejos de querer darle un significado a este gesto, Nick -que ha aprovechado también para tatuarse dos querubines con las caras de sus gemelos Monroe y Moroccan (3)- considera que se trata simplemente de una manera como otra cualquiera de seguir adelante con su vida.
"Todo el mundo dice: 'Está intentando cubrir sus tatuajes anteriores'. Pero para mí, es sencillamente mi vida. [El tatuaje de Mariah] es parte de quién soy, así que lo incorporé a la nueva pieza de arte", explicó el rapero a Entertainment Tonight.
Tras poner punto final a su matrimonio de seis años con la diva de la canción, la mayor preocupación de Nick es centrarse en el cuidado de sus pequeños, por lo que intenta hacer oídos sordos a los rumores.
"Tienes que tomarte la vida y sus reveses como obstáculos que han sido puestos ahí para que los superes. Si tú no tienes problemas, y tu familia tampoco, entonces lo que diga el resto de la gente no importa", añadió.
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